Abrázame por si acaso: Reflexiones de una generación con contacto físico limitado

Cuando era pequeña recuerdo que en casa de mis abuelos nos sentábamos a la mesa y sabía a ciencia cierta que habría un plato de comida rebosante. Me parecía una montaña que debía escalar, de patatas y verdura hasta llegar a la cima y acabar el plato. Me lo tenía que acabar, no estaba bien […]